- 1 conejo
- 5 dientes de ajo
- 1 cebolla
- 1 botella de vino blanco
- Sal
- pimienta
- una cucharadita de oregano
- una cucharadita de tomillo
- media cucharadita de pimenton
- 3 cayenas
- 1/2 vaso de vinagre ( 100 ml)
- 2 hojas de laurel
- Aceite oliva virgen extra
Preparacion
- Lo primero que vamos a hacer es poner aceite en una cazuela, cortar la cebolla en juliana y ponerla a pochar a fuego medio alto,
- Removiendo de vez en cuando para que no se nos queme, que si no la cebolla quemada amarga,
- Si veis que el fuego esta muy alto, no pasa nada, lo bajáis un poco y listo.
- lo siguiente que vamos a hacer es salpimentar el conejo
- Y cuando la cebolla ya este transparente y bien pochada, lo vamos a introducir en la cazuela y lo vamos a marcar ligeramente,
- No hace falta que se dore, solo marcarlo un poco para quitarle el color natural y sellar la sangre.
- Turno ahora de agregar el vino, fijaros en el color del conejo, no esta dorado, solo marcado un poco
- Echar el vino y ponerlo a fuego alto hasta que rompa a hervir, luego lo bajais y lo dejais a fuego medio
- A continuación y en un mortero vamos meter los cinco dientes de ajo ya pelados
- Y las dos cucharaditas de especias, la de tomillo y la de orégano, lo machacamos todo bien
- Y lo incorporamos al guiso…
- En el mortero donde machacamos los ajos echamos el vinagre,
- Así conseguiremos que los restos que hubieran quedado del machacado se limpien y añadan también al guiso
- Junto al vinagre ponemos también la media cucharadita de pimentón, o dulce o picante, a vuestra elección, lo removemos bien
- Y se lo agregamos al guiso
- Junto con las 3 cayenas( al hacer la foto se me cayó una jijiji pero si miráis el caldo ahí esta jajaja)
- Ponemos las dos hojas de laurel y ahora si, solo queda dejarlo que cueza hasta que reduzca el vino
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